Verdad, Inspiración, Esperanza

Despegue hoy: reconozca sus obstáculos y ábralos para superarlos

Published: 21 de mayo de 2022
Sentirse atascado nunca es divertido y, a menudo, debilitante. Al reconocer nuestros obstáculos y trabajar en ellos de manera proactiva, nos despegaremos en poco tiempo. (Imagen: Andrea Piacquadio a través de Pexels)

Estar atrapado en una rutina es una experiencia desagradable pero común. El fuerte deseo de despegarse junto con la aparente incapacidad para cambiar las cosas puede adormecernos y hacernos olvidar las posibilidades ilimitadas que tenemos por delante.

Siempre que reconozca sus obstáculos, no son imposibles de superar. Algunas de las barreras más comunes a las que nos enfrentamos pueden abordarse con un simple cambio en nuestro estado de ánimo. Al trabajar proactivamente en nosotros mismos, podemos volver al flujo en poco tiempo. 

Barreras internas: 

1. Autopercepción:

¿Crees que eres capaz y probable de lograr tus objetivos, o hay una voz de duda en tu cabeza? Cuando nos falta confianza en nosotros mismos, no solo estamos desacreditando el esfuerzo que hemos hecho para desarrollar nuestras capacidades, sino que también estamos dejando de reconocer nuestro potencial.

Tómese un momento para identificar sus fortalezas y debilidades y permítales informar sus decisiones. Al ser consciente de sus limitaciones y capitalizar sus habilidades, puede enfrentar sus desafíos con total confianza y aprovechar cada oportunidad para trabajar en sus fallas. 

2. Miedo al fracaso:

Albert Einstein dijo: “Una persona que nunca comete un error, nunca intenta nada nuevo”.

El miedo es un sentimiento feroz que puede impedirnos salir de nuestra zona de confort. Despegarse implica aceptar el cambio y enfrentarse a todo tipo de incertidumbre. Cambiar nuestra perspectiva sobre el fracaso y comprender su papel en nuestra superación personal nos permite enfrentarlo de frente y fortalecer nuestro carácter en el proceso.

Fallar es aprender. Si soltamos nuestro miedo al fracaso, podremos salir de nuestra zona de confort. (Imagen: mohamed_hassan vía Pixabay)

3. Miedo a la crítica:

“La crítica puede no ser agradable, pero es necesaria. Cumple la misma función que el dolor en el cuerpo humano. Llama la atención hacia un estado poco saludable de las cosas.» Cuando Winston Churchill dijo estas palabras, hizo una observación importante: sin críticas, seríamos ajenos a nuestras deficiencias. Por doloroso que sea, recibir críticas prepara el escenario para que crezcamos.

Dado que la crítica es inevitable y beneficiosa, no se debe temer. Acéptalo como una retroalimentación constructiva y conviértelo en una oportunidad para identificar en qué necesitas trabajar.

4. Pensamientos negativos:

El pensamiento taoísta sostiene que todo está siempre cambiando y evolucionando. Dado que nada es permanente, estamos obligados a enfrentar la incertidumbre en cada etapa de nuestras vidas, que nuestras mentes enfrentan preparándose para el resultado menos favorable.

Si bien pensar en el futuro nos ahorra sorpresas no deseadas, también puede generar sentimientos de ansiedad y preocupación que tienden a nublar nuestro juicio y arrastrarnos hacia abajo. Aprenda a reconocer el pensamiento negativo y ponga un poco de esfuerzo en buscar el arcoíris y las líneas plateadas.

Nuestras mentes pueden convertirse en una prisión si no controlamos nuestros pensamientos. (Imagen: mohamed_hassan vía Pixabay)

5. Autocrítica:

La autocrítica es otra trampa peligrosa. Al menospreciarnos a nosotros mismos y nuestros logros, no solo estamos extinguiendo nuestras posibilidades de crecimiento sino también dañando nuestra relación con nosotros mismos. Cultiva la autocompasión para deshacerte de este hábito dañino. El simple hecho de tener un corazón de gratitud y empatía abrirá muchas puertas para un cambio positivo. 

Barreras externas: 

1. Falta de recursos:

No tener los medios para emprender un proyecto es desalentador y muchas veces fuera de nuestro control. Sin embargo, esta situación puede revertirse simplemente cambiando nuestra perspectiva; es decir, ¡trata de ver el vaso medio lleno!

En lugar de enfocarte en lo que te falta, piensa en lo que tienes. Rara vez hay una sola solución. Abre tu mente al uso creativo de los recursos que tienes a mano y mira la situación como una oportunidad para desbloquear aún más tu potencial. 

2. Falta de oportunidades:

¿Qué pasa si tienes las habilidades y el entusiasmo, pero no hay oportunidades en tu camino? Si está esperando y esperando sin tomar acción, sus esperanzas pueden convertirse en nada más que un sueño.

El empresario estadounidense Jim Rohn aconsejó: “Empieza desde donde estés y con lo que tengas”, explicando, “ a menudo, las oportunidades más extraordinarias se esconden entre los eventos aparentemente insignificantes de la vida. Así que reúna sus habilidades y comience a usarlas de inmediato, en lugar de esperar «el momento adecuado».

¿Está el vaso medio vacío o medio lleno? No siempre podemos controlar las circunstancias, pero podemos controlar nuestra perspectiva. (Imagen: Stephan Müller a través de Pexels)

Barreras de comportamiento

1. Mantienes el ‘statu quo’:

Einstein dijo: “Locura es hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes”. La mejor manera de salir de la rutina es probar un nuevo enfoque.

Considere posibles enfoques alternativos que podrían ayudarlo a seguir adelante. Aunque modificar nuestro modus operandi requiere mucho coraje, y es posible que falles, no lo sabrás si no lo intentas.

2. Estás fallando en tomar decisiones:

Jim Rohn también enfatizó la importancia de la decisión activa: “O corres el día o el día te corre a ti”. Cuando no nos hacemos cargo de nuestras vidas, es posible que nunca alcancemos nuestro potencial. 

Tómese un momento para definir sus metas. ¿Qué tipo de elecciones tendrá que hacer para lograrlos? Cuando estamos firmes en lo que queremos ser, podemos tomar las decisiones diarias correctas que nos acerquen a nuestros objetivos. 

Damos forma a nuestras vidas con cada decisión que tomamos o dejamos sin tomar. (Imagen: qimono a través de Pixabay)

3. No te haces responsable

Cuando estás atascado, ¿te examinas a ti mismo o simplemente culpas a tus circunstancias? Cuando no somos capaces de reconocer nuestro propio papel en una situación dada, es imposible crecer. Pregúntese qué pudo haber hecho para causar este incómodo estado inmutable. 

¿No aprovechó una oportunidad porque parecía demasiado difícil? ¿Has sido indulgente en lugar de ser estricto contigo mismo? Cuando reflexionamos sobre nuestras deficiencias, es más probable que asumamos la responsabilidad y modifiquemos nuestro comportamiento. 

4. Te estás comparando con los demás.

Lao Zi dijo una vez: “Cuando te contentas con ser simplemente tú mismo y no comparas ni compites, todos te respetarán”. Compararse con los demás en un intento de medir su progreso puede hacer más daño que bien. 

Recuerda que cada individuo es único, con diferentes fortalezas, diferente carácter y diferentes circunstancias.

Para obtener una idea precisa de cuánto ha progresado, use su viejo yo como referencia. Identifique cómo han cambiado sus comportamientos, pensamientos y emociones, y si estos cambios han sido positivos. Si no, ¡enhorabuena! Has encontrado una oportunidad para mejorar y avanzar en tu viaje para convertirte en la mejor versión de ti mismo. 

Lea también: