El presidente serbio, Aleksandar Vucic, apoyó al tenista Novak Djokovic desde un principio y más aún cuando el domingo se conoció la noticia de su deportación definitiva de Australia.
En respuesta, dijo que Nole fue maltratado en una «caza de brujas» similar a un espectáculo de estilo «orwelliano». «Quisieron mostrar en Novak cómo funciona el orden mundial y qué pueden hacer contra cualquiera», dijo Vucic, citado por la agencia de noticias Tanjug.
Por orden mundial seguramente se refiera al “nuevo orden mundial”, lo que muchos consideran un plan globalista para instaurar un gobierno único, burocrático y controlado por sectores elitistas.
«No han humillado a Djokovic sino que se han humillado ustedes mismos», dijo el mandatario nacionalista en referencia a las autoridades australianas.
«Quienes creen que han hecho triunfar algunos principios han mostrado que carecen de principios», aseguró el líder del SNS, el partido conservador que está en el poder desde 2012.
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Luego de que Novak llegara a Serbia este lunes 17 de enero, el presidente Aleksandar Vucic volvió a expresarse y a afirmar que el “maltrato” que recibió Nole en Australia podría deteriorar las relaciones diplomáticas entre ambos países.
“Han maltratado a un tenista durante diez días para entregarle al final una decisión cuyo contenido sabían desde el primer día”, afirmó Vucic.
Esto lo dijo en referencia a que en lugar de decir desde el principio que sin vacunación definitivamente no se podía participar en el torneo, las autoridades australianas anunciaron que se emitirían exenciones médicas, por lo que Djokovic procedió según se pedía y viajó allí, con el beneplácito de las autoridades tanto del torneo como de Victoria, estado donde se está disputando el torneo Australia Open.
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“Me desvivo para poder verlo en Serbia. Quiero que vuelva a su país, que vuelva a donde siempre es bienvenido”, dijo el presidente serbio horas antes de que aterrice.
“Djokovic puede volver a su país con la frente en alto”, agregó.
“Nunca nos podrán quitar nuestro corazón ni nuestra dignidad. Si querían impedir que Djokovic ganara el trofeo por décima vez, ¿por qué no lo deportaron de inmediato? ¿Por qué no le denegaron el visado? ¿Por qué lo persiguieron? Nos sermonean con el Estado de derecho. Se pueden imaginar si un ministro serbio anulara una decisión de un juez (…). Podrían enseñarnos lo que es un poder judicial independiente, pero parece redundante porque al final todo el poder está en manos del Ejecutivo”, argumentó el presidente.
El presidente nacionalista le envió un mensaje directamente a Scott Morrison, el primer ministro australiano, diciendo. “Un presidente de un país pequeño puede decirle esto a un gran primer ministro de un país grande porque estoy diciendo la verdad y usted sabe que estoy diciendo la verdad. Usted cree que consigue algo persiguiéndolo, pero nunca estará a la altura no de Novak Djokovic, sino de ningún hombre corriente de nuestra tierra ni de su orgulloso y digno pueblo. Serbia estará con Djokovic y le responderemos comportándonos mucho mejor de lo que lo ha hecho usted con Djokovic”.
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Trasfondo
La estrella del tenis mundial superó el Covid-19 en diciembre y gozó de una exención médica por no estar vacunado. Sin embargo, las autoridades de inmigración australianas cancelaron con rapidez su visado y lo detuvieron. El pasado lunes fue puesto en libertad por una orden judicial que entendió que no había sido tratado con «equidad».
El Gobierno australiano anuló su visado este viernes -por segunda vez-, al subrayar que la presencia del número uno del tenis mundial en Australia podría avivar el sentimiento de las personas que se oponen a vacunarse contra la covid-19 y derivar en disturbios sociales.
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Finalmente, en la madrugada de este domingo el pleno del Tribunal Federal de Australia decidió de manera unánime la cancelación definitiva del visado del tenista y su respectiva deportación.
Según la ley, Novak Djokovic se enfrenta además a una prohibición de regresar al país durante tres años, salvo ciertas excepciones, que pueden incluir «circunstancias imperiosas que afectan los intereses de Australia».
Profeta en su tierra
El 17 de enero, el mismo día en que comenzó el torneo Australia Open sin su presencia, el tenista número uno del mundo regresó a Serbia, su tierra natal, tras hacer una breve escala en Dubai.
Simpatizantes del tenista lo esperaron en el aeropuerto de Belgrado con banderas y carteles que decían, entre otras frases: “Novak, Dios te bendiga”.
El jugador se tomó fotos con algunos empleados del aeropuerto y luego se fue en un vehículo conducido por su hermano Djordje.
