Tomar café es un ritual matutino para la mayoría de los adultos. Los bebedores de café dirán que los despierta y les hace estar más alerta. Aunque hay estudios que demuestran los beneficios para la salud de este alimento básico en el lugar de trabajo, también hay estudios convincentes sobre sus efectos secundarios negativos. La cafeína es la segunda sustancia psicoactiva más popular, solo superada por el azúcar. Se considera una de las drogas más utilizadas en el mundo, y es adictiva. El análisis de los pro y contras puede ayudarle a tomar una decisión informada sobre si el café es bueno para usted y en qué medida.
Longevidad
Grandes estudios de investigación realizados en Europa y América que analizan los datos sobre la salud y los hábitos de consumo de café han determinado que beber de una a tres tazas de café al día puede reducir el riesgo de muerte entre un 12 y un 18 por ciento. Los investigadores creen que los compuestos vegetales antioxidantes que contiene el café son los responsables de este beneficio. Al mismo tiempo, estudios más pequeños han demostrado que el consumo de café puede aumentar el riesgo de muerte en determinados grupos.
Un estudio dirigido por el Dr. Lueio Mos demostró que el consumo de café conlleva un mayor riesgo de infarto en adultos jóvenes diagnosticados de hipertensión leve, y que el consumo moderado triplicaba el riesgo. Un estudio asociado a la Clínica Mayo descubrió que más de cuatro tazas de café al día estaban relacionadas con una muerte prematura, con un aumento del 21% de la mortalidad por todas las causas en los hombres que bebían más de 4 tazas de café al día.
Otro estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition determinó que el consumo excesivo de café se asociaba a un modesto aumento del riesgo de enfermedad cardiovascular. Esta conclusión fue respaldada por un estudio australiano, que también determinó que quienes beben más de seis tazas de café al día corren el riesgo de tener una mala salud, una mala calidad de vida y un posible aumento de la tasa de mortalidad.
Estrés
Algunos científicos nos dicen que el café alivia el estrés al activar la «hormona de la felicidad», la dopamina. Como la cafeína estimula el sistema nervioso central, hace que el cerebro libere más dopamina, haciéndonos sentir más felices. Al mismo tiempo, el consumo de cafeína puede provocar un aumento de la ansiedad, la depresión y la necesidad de tomar medicamentos para la ansiedad.
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Un estudio de la Asociación Americana de Psicología demostró que la cafeína provoca un aumento de la ansiedad, la depresión y la hostilidad. Según Caffeine Informer, esto ocurre principalmente en individuos con una ligera variación genética en sus receptores de adenosina, que no solo son responsables de los efectos despertadores de la cafeína sino que también regulan la sensación de ansiedad de una persona. Sugieren que las personas que experimentan ansiedad y no son consumidores habituales de cafeína se abstengan de consumirla por completo.
La revista Neurology también informó de que la cafeína puede provocar dolores de cabeza. Su estudio demostró que, mientras que los no consumidores de cafeína informaron de 2 a 104 días de dolor de cabeza al año, los consumidores de cafeína informaron de 180 o más días de dolor de cabeza al año.
El estudio incluyó a los que consumen cafeína en forma de café y a los que la toman medicinalmente. La cafeína se prescribe a menudo para aliviar las migrañas o los dolores de cabeza causados por el estrés, pero los factores que hacen que la cafeína sea eficaz para aliviar el dolor también pueden causar dolores de cabeza. Aunque la cafeína ayuda a reducir la inflamación al contraer los vasos sanguíneos que rodean el cerebro, el dolor vuelve a aparecer cuando se hinchan de nuevo, lo que hace que uno dependa de la cafeína para aliviar el dolor.
Rendimiento mental
Está ampliamente aceptado que la cafeína puede ayudar a la concentración, y un estudio de la Universidad Johns Hopkins también sugirió que la cafeína puede mejorar la memoria a largo plazo. Se realizó un experimento de memoria en el que se mostró a los participantes una serie de imágenes. Con 200 mg de cafeína, los participantes fueron más capaces de distinguir estas mismas imágenes de otras similares.
Sin embargo, la Biblioteca Nacional de Ciencias publicó una conclusión definitiva basada en un gran número de estudios literarios. Afirmaron que «la cafeína facilita el aprendizaje en tareas en las que la información se presenta de forma pasiva; en tareas en las que el material se aprende intencionadamente, la cafeína no tiene ningún efecto. La cafeína facilita el rendimiento en tareas que implican a la memoria de trabajo en un grado limitado, pero dificulta el rendimiento en tareas que dependen en gran medida de la memoria de trabajo, y parece mejorar más bien el rendimiento de la memoria en condiciones de alerta subóptimas. La mayoría de los estudios, sin embargo, encontraron mejoras en el tiempo de reacción. La ingestión de cafeína no parece afectar a la memoria a largo plazo».
La salud de las mujeres
Aunque pocos de los beneficios del consumo de café son específicos de cada sexo, según Heart.org, el consumo habitual de café se ha relacionado con un menor riesgo de enfermedad coronaria en las mujeres.
Sin embargo, los Institutos Nacionales de Salud advirtieron a las mujeres contra el consumo de café debido a su relación con los abortos espontáneos. Un artículo de 2016 afirmaba: «Una mujer tiene más probabilidades de sufrir un aborto espontáneo si ella y su pareja beben más de dos bebidas con cafeína al día durante las semanas previas a la concepción.
Del mismo modo, las mujeres que bebían más de dos bebidas con cafeína diarias durante las primeras siete semanas de embarazo también tenían más probabilidades de sufrir un aborto espontáneo.»
Al parecer, la cafeína también afecta a la fertilidad. Según Caffeine Informer, las mujeres que consumen café o bebidas energéticas con regularidad muestran una disminución del 27 por ciento en la fertilidad. También se estudió la fertilidad de los hombres, y los resultados mostraron que los hombres que consumían cafeína en forma de refresco de cola presentaban una reducción del 30 por ciento en el recuento de espermatozoides, mientras que los que consumían cafeína en forma de té o café no veían ninguna diferencia.
El Journal of the National Cancer Institute descubrió que «la aparición de la enfermedad fibroquística de la mama se asociaba positivamente con el consumo medio diario de cafeína. Las mujeres que consumían entre 31 y 250 mg de cafeína al día (lo que equivale a entre un tercio de taza y dos tazas y media de café) presentaban un aumento de 1,5 veces en las probabilidades de padecer la enfermedad, mientras que las mujeres que bebían más de 500 mg/día presentaban un aumento de 2,3 veces en las probabilidades».
Qué hacer
Lo más probable es que usted ya sea un bebedor de café. ¿Quizás esto le haya hecho reflexionar y quiera reducir su consumo sin renunciar a los beneficios del café? Aunque más de la mitad de los adultos consumen café a diario, el resto de la población se las arregla sin él. Un paseo a paso ligero, los estiramientos o la meditación, o un batido repleto de vitaminas son algunas formas alternativas de despertarse y empezar el día. Los antioxidantes y compuestos beneficiosos que se encuentran en el café están fácilmente disponibles en otras fuentes de alimentos. Las bayas y las verduras de hoja verde, y especialmente los alimentos silvestres, son excelentes potenciadores de la salud.
Si piensa dejar el café, debe saber que, como droga adictiva, el consumo de cafeína puede provocar cafeinismo. Se trata de un estado de intoxicación causado por el consumo excesivo de cafeína que puede manifestarse en una variedad de síntomas físicos y mentales desagradables. Con el cafeinismo, al igual que con el alcoholismo y otras adicciones a las drogas, se experimentan síntomas de abstinencia cuando se deja de consumir la droga. Estos síntomas remitirán cuando se supere la adicción. Con una dieta nutritiva y equilibrada, una actividad regular al aire libre y un buen sueño, se puede estar alerta, sin estrés, sano e inteligente, sin ser esclavo de los estimulantes.
Aunque nos gusta justificar nuestros hábitos y adicciones destacando los aspectos positivos, toda moneda tiene dos caras. La moderación es la clave si quiere disfrutar de los beneficios y evitar los efectos secundarios negativos del café. Como afirmó la Escuela de Medicina de Harvard en su Harvard Health Letter en relación con el café, «una cosa es decir que el café puede ser bueno para usted; otra es decir que es tan bueno para usted que se debería recomendar su consumo. Y todavía no hemos llegado a ese punto».
