El pasado domingo 28 de agosto, el expresidente de Bolivia, Evo Morales, sufrió el hurto de su teléfono celular en un acto de campaña, por lo que ordenó una movilización de los policías presentes en el lugar para intentar recuperar el dispositivo y evitar la filtración de información sensible.
Este martes confirmó que, además de su teléfono celular, fueron robados otros dos teléfonos de una de sus asistentes.
“Que el pueblo boliviano y especialmente la militancia del MAS-IPSP sepa: además de mi teléfono, robaron dos celulares de mi única asistente de comunicación“, escribió el exmandatario izquierdista en la red social Twitter.
Además reiteró «que es la primera vez que les pasa» y que espera que no sea un «acto premeditado».
El 29 de agosto, Morales informó que el robo de su celular ocurrió en un acto que contaba con la presencia del ministro de Gobierno y su seguridad. «Primera vez que nos pasa algo parecido en todos estos años de actividad política. No quisiéramos pensar que es parte de un ataque planificado para perjudicarnos», agregó.
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Además advirtió que denunciará cualquier intento de usar montajes o tergiversaciones en su contra.
El acto político del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS) se realizó el domingo en un poblado del departamento de Santa Cruz.
Morales ha manifestado con anterioridad su disconformidad y sus críticas al desempeño del ministro Del Castillo.
En este sentido, el expresidente impulsó una campaña en contra del ministro desde diciembre de 2021 y concluyó cuando hubo una reunión de toda la cúpula del MAS con el Gobierno. Morales y las organizaciones del Pacto de Unidad pidieron abiertamente la renuncia o destitución del ministro. Sin embargo, Arce no cumplió con el pedido.
El hurto de los teléfonos móviles se produjo el día en el que el presidente Luis Arce se encontraba fuera del país y participaba en la XXII Cumbre Presidencial Andina.
Por su parte, el ministro Del Castillo no hizo ninguna referencia sobre el tema del celular de Morales.
«Rastrillaje intenso»
Según informó el medio local El Deber, alrededor de las 20.30 se reportó el robo del teléfono móvil de Morales y se desplegó un descomunal operativo para encontrarlo.
El periódico detalló que el comandante nacional de la Policía, Orlando Ponce, dio la instrucción para que agentes de inteligencia, del Departamento de Análisis Criminal e Inteligencia (DACI) y todas las unidades realicen “un rastrillaje intenso”.
Algunos agentes -que pidieron el anonimato- protestaron porque a pesar de estar de descanso los obligaron a participar en la búsqueda del teléfono del expresidente, según reportó el mismo medio.
Asimismo, informó que los policías aseguraron que al parecer existe temor por el acceso a la información y los contactos que mantiene Morales, porque su teléfono móvil podría no tener patrón de seguridad.
Así, dentro del MAS crece la inquietud por posibles filtraciones de mensajes o imágenes del expresidente, tanto de índole privada como gubernamental.
Puja de poder entre Arce y Morales
Los dos líderes actuales, el presidente Luis Arce y el hombre que lo designó, Evo Morales, quieren ser candidatos presidenciales en 2025 y parece que ninguno de los dos está dispuesto a ceder.
Analistas ya anticiparon que las discusiones internas del MAS ponen las cosas muy difíciles en las internas y las facciones están cada vez más definidas.
La llegada de Arce a la presidencia se dio tras las elecciones que propició la gestión de Jeanine Añez, posterior a la renuncia forzada de Morales y su posterior huida del país en medio de protestas multitudinarias por el fraude electoral denunciado por la Organización de Estados Americanos (OEA). Dentro de la facción de Morales, su caída del país fue un «golpe de estado» y pide que así se la identifique.
Sin embargo, Arce no hace mucha referencia al tema porque resultó el máximo beneficiario ya que le permitió acceder a la presidencia, tras ser ministro de Economía entre 2006 y 2018, según afirma la oposición.
De acuerdo a Infobae, Morales y Arce realizan actos juntos, pero están distanciados y solo uno de ellos puede llegar a ser presidente y liderar el MAS.
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