Un grupo de arqueólogos halló restos óseos de al menos 25 personas sacrificadas en unas ruinas mayas del sureste de México.
Los investigadores descubrieron cráneos, fragmentos de mandíbula y otras partes óseas de hombres jóvenes en su mayoría, según anunció el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Específicamente, el hallazgo se dio bajo la pirámide maya de un templo en la zona arqueológica de Moral-Reforma, en el estado de Tabasco, México.
“De ese número de entierros (13) se contabilizaron ocho individuos que debieron ser decapitados y partes de sus cuerpos desmembradas y colocadas separadas, para consagrar el templo”, explicó Francisco Apolinar Cuevas Reyes, coordinador del proyecto Arqueológico, según el comunicado de prensa del INAH.
Los investigadores encontraron dos enterramientos separados en la pirámide maya ubicada en México, uno encima del otro y a distintas profundidades.
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El enterramiento más antiguo databa de entre el 300 a.C. y el 250 d.C. y contenía los restos de doce personas. También se hallaron 567 objetos como collares y vasijas a modo de ofrenda, según el INAH.
El otro enterramiento dataría de entre 600 y 900 d.C. En aquella época, el yacimiento maya del río San Pedro Mártir desempeñaba un papel importante en el intercambio de bienes y cultura entre los pueblos mayas del Petén guatemalteco y los de la costa del Golfo de México.
Los sacrificios humanos probablemente tengan que ver con ofrendas hacia una deidad del inframundo característica de la creencia maya. Estos sacrificios pueden haber sido parte del colapso de su civilización.
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El colapso maya ha sido un misterio durante siglos.
Han surgido muchas teorías sobre la causa de su colapso, y ahora hay evidencia que apunta a una sequía prolongada y severa.
La historia ha demostrado repetidamente que aunque las civilizaciones pueden lograr avances técnicos significativos y preservar una gran cantidad de conocimiento, eso no las hace inmunes al colapso.
La creencia tradicional sostiene que cuando los estándares morales son altos y la gente actúa de acuerdo con la voluntad del Cielo, los seres divinos protegerán y preservarán su civilización; pero cuando la gente abandona la moralidad y actúa por egoísmo y codicia, complaciendo todos sus deseos, el desastre es inminente.
