Los residentes de uno de los complejos de viviendas públicas más grandes de Manhattan no han tenido agua potable segura durante más de una semana después de que se encontraron niveles peligrosos de arsénico, por encima de los estándares federales, en el agua del grifo de la comunidad.
A partir del lunes, se les dijo a los residentes de Jacob Riis Houses en la ciudad de Nueva York que evitaran el agua del grifo del edificio mientras los funcionarios esperan los resultados de las pruebas adicionales. Todas las pruebas más recientes dieron negativo para el elemento químico peligroso, pero aún se recomienda a los residentes que no beban ni cocinen con el agua en su edificio, informó NBC New York.
El agua del grifo en la comunidad, que consta de 19 edificios y alberga a más de 2600 residentes, fue analizada inicialmente por la Autoridad de Vivienda Pública de la Ciudad de Nueva York (NYCHA) en agosto, después de que los residentes se quejaran de que el agua turbia y marrón salía de sus grifos.
Según el medio de comunicación local The City, los residentes del complejo solo fueron informados de la contaminación el viernes pasado, a pesar de que los funcionarios conocían los resultados de las pruebas dos semanas antes.
The City informó que “no fue hasta que THE CITY pidió que el alcalde se presentara abruptamente para distribuir agua embotellada”.
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Malina Barbosa, residente de Riis, le dijo a The City: “Nosotros no bebemos el agua. Huele un poco. Cuando lo apagan y vuelve a encenderse, es marrón”.
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A última hora de la noche del 2 de agosto, los funcionarios de NYCHA le dijeron a The City que el alcalde Eric Adams entregaría agua embotellada a la comunidad, pero que no respondería a las preguntas de los medios.
“La NYCHA más tarde ese día confirmó a The City que el agua en el complejo de viviendas públicas había dado positivo previamente por arsénico, pero los resultados de las pruebas supuestamente solo se confirmaron ese día”, informó The Guardian.
Según un portavoz de la ciudad de Nueva York, «los resultados preliminares recibidos hoy de la repetición de la prueba mostraron niveles de arsénico superiores al estándar federal para el agua potable, y aunque no hay evidencia que lo vincule con el agua turbia, la ciudad ha tomado medidas inmediatas, incluida la prestación de apoyo y agua potable para cada hogar en Riis mientras realizamos pruebas de agua adicionales”.
Se inició una investigación para determinar cómo se contaminó el suministro de agua del complejo Riis, y se le dijo a NYCHA que retenga todos los documentos relacionados con la investigación, informó The City.
La exposición al arsénico se ha relacionado con varios tipos de cáncer, así como con puntuaciones bajas de coeficiente intelectual en los niños.
NYCHA estuvo bajo un intenso escrutinio en 2016 después de que se encontraron niveles elevados de plomo en la sangre de sus residentes, y permanece bajo la supervisión de un monitor federal.
El exalcalde Bill de Blasio resolvió una demanda de 2016, presentada por el Fiscal Federal de Manhattan, que acusó a la administración de la autoridad de vivienda de encubrir deliberadamente condiciones insalubres e inseguras en sus comunidades, incluida la exposición de niños a pintura con plomo e infestaciones de moho que afectaron a los inquilinos con asma.
