El gobierno chino ha iniciado un nuevo esfuerzo para ampliar sus fuerzas militares. Según los medios de comunicación estatales, el Ejército Popular de Liberación (EPL) ha estado «optimizando» su estructura de personal mediante el despliegue de más tropas y la reducción de aproximadamente 300.000 puestos de su personal no combatiente.
Esto se suma a los cientos de miles de tropas que se retiraron previamente bajo la revisión del líder chino Xi Jinping del EPL a finales de 2015 y 2016.
Según el comentarista militar Zhong Xin, los recursos de los puestos eliminados se añadieron a la inteligencia militar y al personal. Aunque Zhong no reveló los detalles que rodean la reestructuración, una fuente no revelada dijo al South China Morning Post que se habían asignado recursos significativos a las funciones de primera línea con la esperanza de animar a más jóvenes profesionales a unirse al EPL.
La fuente, que prefirió permanecer en el anonimato, dijo que las unidades que obtuvieron más recursos fueron: las fuerzas aéreas, de cohetes y de apoyo estratégico.
«Las unidades de tropas aéreas del EPL pasaron de ser divisiones a brigadas, mientras que el número de pilotos también se incrementó para apoyar más aviones de combate de nueva generación como los J-20, J-16 y J-10C», dijo la fuente.
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SCMP también informó de que el EPL planeaba ampliar su cuerpo de marines de 20.000 soldados a 100.000, al tiempo que aumentaba el número de brigadas de dos a 10. Las tropas seleccionadas serían estacionadas en puertos internacionales operados por China, como Djibouti en África y Gwadar en el suroeste de Pakistán.
Un ejército de categoría mundial a la altura de Estados Unidos
El ejército chino ha sido siempre uno de los más grandes del mundo. En la década de 1950 contaba con más de 6 millones de efectivos, cifra que se redujo a más de la mitad cuando Xi asumió el poder en 2012. El líder impulsó una serie de reformas a partir de 2015 que reestructuraron completamente el EPL, un movimiento acompañado de su purga de oficiales corruptos y desleales. Xi tiene el objetivo declarado de transformar el EPL en una fuerza de combate moderna para 2027 y lograr un ejército de clase mundial a la altura de Estados Unidos para 2050.
Pero Zhong, comentarista de asuntos militares, dice que hay que trabajar mucho más para lograr las ambiciones del EPL de renovar su actual estructura militar.
«El sistema de mando militar no es sistemático, la estructura del ejército no es lo suficientemente sólida y el sistema de políticas se retrasa, limitando seriamente las operaciones defensivas del EPL», escribió Zhong. «Si no se resuelven estos problemas, los planes para construir un ejército moderno de clase mundial son sólo palabras vacías».
En un análisis publicado por la publicación china Editorial del Pueblo a principios de este mes, Liu Yantong, otro comentarista militar, subrayó que ya era hora de que el gobierno chino pusiera mucho más énfasis en el fortalecimiento de sus fuerzas militares.
«Ahora mismo, nos enfrentamos a la amenaza de una guerra. El ejército debe ser urgentemente consciente de que una guerra puede ocurrir de la noche a la mañana… Debemos estar totalmente preparados y listos para el combate en todo momento», escribió Liu, añadiendo que China se enfrenta a mayores riesgos de seguridad a medida que experimenta una creciente presión tecnológica, económica y política de otros países.
Estados Unidos y otros países en alerta máxima
Anteriormente, el 30 de noviembre, el columnista naval estadounidense H.I. Sutton publicó una imagen de satélite que supuestamente mostraba un submarino chino de propulsión nuclear cruzando ilegalmente el estrecho de Taiwán el 29 de noviembre.
Los expertos militares dijeron que era inusual que un submarino de misiles balísticos saliera a la superficie, especialmente una nave avanzada de la Armada del Ejército Popular de Liberación (PLA) como la que fue vista el lunes. Los submarinos de la clase Jin llevan misiles balísticos JL-2 con un alcance de aproximadamente 7.000 km (4.350 millas) -lo que alude a la posibilidad de que estos misiles puedan alcanzar la costa norte de Estados Unidos-, lo que puso a Washington en alerta máxima.
No es la primera vez que saltan las alarmas respecto a las actividades de patrullaje del gobierno chino. Las fuerzas taiwanesas han detectado continuamente aviones y submarinos militares del EPL entrando ilegalmente en sus fronteras.
A principios de octubre, el EPL envió un número récord de aviones de guerra a la zona de identificación de defensa aérea (ADIZ) de Taiwán.
Según el Ministerio de Asuntos Exteriores de la República de China (Taiwán), los aviones incluían 28 cazas J-16, cuatro cazas SU-30, cuatro bombarderos H-6, un avión de alerta temprana y un avión de guerra antisubmarino.
Asimismo, en 2019, los aviones militares rusos que entraron en el espacio aéreo de Corea del Sur fueron recibidos con cientos de disparos de advertencia por parte de aviones de guerra surcoreanos durante una patrulla conjunta con China.
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Según el Ministerio de Defensa ruso, una videollamada entre el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, y el general de Defensa chino, Wei Fenghe, culminó con el acuerdo de ampliar los ejercicios estratégicos y las patrullas conjuntas en la región de Asia-Pacífico, centrándose en el Mar de Japón y el Mar de China Oriental.
Shoigu añadió que se había producido una «significativa intensificación» de las actividades de los bombarderos estratégicos estadounidenses cerca de las fronteras de Rusia. «En el último mes, se han realizado unas 30 salidas hacia las fronteras de la Federación Rusa, lo que supone 2,5 veces más que en el periodo correspondiente del año pasado», dijo el ministro.
