Diez estados gobernados por los republicanos han presentado una demanda contra el mandato de vacunación del presidente Joe Biden para el personal sanitario, calificándolo de inconstitucional e ilegal.
La demanda
En un comunicado oficial el miércoles, el fiscal general de Missouri, Eric Schmitt, uno de los demandantes, dijo: «Desgraciadamente, con este último mandato de la administración Biden, los héroes de la sanidad del año pasado se están convirtiendo en los nuevos despedidos de este año».|
La demanda fue iniciada por los fiscales generales de Missouri, Nebraska y Alaska, y firmada por los de Kansas, Iowa, Dakota del Sur, Arkansas, New Hampshire, Dakota del Norte y Wyoming, estados gobernados por los republicanos.
«Exigir a los trabajadores sanitarios que se vacunen o se enfrenten a un despido es inconstitucional e ilegal y podría exacerbar la escasez de personal sanitario hasta el punto de colapsar, especialmente en las zonas rurales de Missouri», añadió Schmitt.
Schmitt anunció la demanda el 10 de noviembre en su página de Twitter, declarando: «Hoy hemos presentado una demanda para detener el ilegal mandato de vacunación de la Administración Biden sobre los trabajadores de la salud».
El mandato de vacunación
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El mandato de vacunación, que la administración Biden emitió el 5 de noviembre a través del Centro para el Servicio de Medicare y Medicaid (CMS), afecta a más de 17 millones de enfermeras de 76.000 centros y proveedores de atención sanitaria certificados por el CMS que reciben financiación de los programas de salud del gobierno.
Schmitt calificó el mandato emitido por los CMS de «extralimitación sin precedentes».
«Al ampliar su alcance de esta manera, el mandato elimina ampliamente a un conjunto diverso de proveedores de atención médica», afirma la demanda. «Estos incluyen, entre otros, clínicas de salud rurales, hospitales, centros de atención a largo plazo y agencias de salud en el hogar».
Recorte de fondos por parte de los CMS
Además de los trabajadores que no cumplen, que se enfrentan a ser despedidos, los proveedores de atención médica que se niegan a cumplir pueden enfrentarse a la terminación de su financiación de la CMS.
La denuncia cita al Dr. Randy Tobler, que dirige el Scotland County Hospital de Memphis (Misuri), un pequeño hospital rural:
«Hubo personas en el hospital que compartieron libremente que si el mandato de la vacuna ocurría… no trabajarían aquí. Es algo que no quieren poner en su cuerpo».
La coalición sostuvo además que el mandato de vacunación «siempre ha sido competencia de los estados, y sigue siéndolo».
«El federalismo permite a los estados adaptar estos asuntos en el mejor interés de sus comunidades», dijo. «La mano dura del mandato nacional de los CMS no lo hace. Por lo tanto, este tribunal debe anular esa norma como una acción ilegal de la agencia en virtud de la Ley de Procedimiento Administrativo.»
El mandato para los trabajadores de la salud no tiene una opción de exclusión para la vacunación mediante pruebas regulares, como es el caso del mandato general de los empleadores privados. En cuanto a la razón por la que no existe esa opción para los empleados del sector médico, un alto funcionario de la administración dijo a The Epoch Times:
«Tenemos una exigencia más alta para los trabajadores de la salud, dado su papel crítico en la garantía de la salud y la seguridad de sus pacientes», y añadió: «Y por lo tanto, es o la vacunación o una exención en virtud de las normas señaladas».
