El vicepresidente de Taiwán, William Lai, partió a Paraguay en un viaje de siete días que incluye una parada de tránsito en Nueva York de camino al país sudamericano y otra en San Francisco a su regreso. China condenó las escalas y existe la preocupación de que responderá a las visitas lanzando ejercicios militares en protesta.
Antes de partir en su viaje, Lai publicó un breve mensaje en X, anteriormente conocido como Twitter:
«Partiré pronto hacia #Asunción para asistir a la toma de posesión [del presidente electo Santiago Peña] y transmitirle a él y al pueblo de #Paraguay los mejores deseos de [Taiwán]». También dijo: «[E]xcited de reunirme con amigos de #US en tránsito».
En respuesta a su publicación, Laura Rosenberger, presidenta del Instituto Estadounidense en Taiwán, la embajada de facto de Washington, que administra las relaciones con Taipei, escribió que el AIT estaba «esperando dar la bienvenida al vicepresidente @chingtelai durante su tránsito en ruta a Paraguay».
Estados Unidos y Taiwán han caracterizado las paradas de Lai como “rutinarias” para los funcionarios taiwaneses. China dice que se opone firmemente a tales «visitas furtivas», especialmente de alguien como Lai, un político que Beijing ha calificado de «separatista de la independencia» de Taiwán.
Success
You are now signed up for our newsletter
Success
Check your email to complete sign up
Lai es el favorito en las elecciones presidenciales de Taiwán programadas para enero y, por eso, este viaje es diferente a cualquier otro que haya hecho.
Los analistas dicen que Taipei y Washington tratarán de garantizar que las escalas de Lai no exacerben aún más las tensiones entre Estados Unidos y China, pero la visita se produce cuando continúan aumentando los desafíos para las relaciones entre las dos economías más grandes del mundo.
“Taiwán y Estados Unidos intentarán hacer que este viaje sea significativo para Lai, pero no de una manera que moleste”, dijo a la VOA Lev Nachman, politólogo de la Universidad Nacional Chengchi en Taiwán.
Los candidatos presidenciales taiwaneses han visitado Estados Unidos durante las campañas electorales en el pasado, pero los expertos dicen que el papel de Lai como vicepresidente en funciones de Taiwán hará que Washington maneje su tránsito con más cuidado porque no quiere que se perciba que apoya a Lai.
“Estados Unidos no puede tratar a Lai demasiado bien ni demasiado mal, por lo que dejarlo transitar por Nueva York y San Francisco es un compromiso, en mi opinión”, dijo a la VOA Chen Fang-yu, politólogo de la Universidad Soochow en Taiwán.
Chen dijo que en un momento en que Washington espera tener un mayor compromiso militar y diplomático con China, con Washington invitando al ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, a visitar Washington el próximo mes, intentará hacer que las escalas de Lai sean «menos formales» para evitar desencadenar una reacción exagerada de Beijing.
“Diplomáticamente, a Estados Unidos le gustaría evitar demasiadas sorpresas”, dijo.
Hasta el momento, las autoridades taiwanesas no han revelado los detalles del itinerario de Lai, pero fuentes con conocimiento del arreglo le dijeron a la VOA que podría realizar eventos con la comunidad taiwanesa estadounidense. En su camino para asistir a la ceremonia inaugural de Pena, Lai se detendrá en Nueva York el sábado y hará otra parada en San Francisco el miércoles antes de regresar a Taiwán.
Lai hizo paradas de tránsito similares en los EE. UU. en enero de 2022 como parte de su viaje a Honduras. Durante esas escalas, realizó reuniones en línea con la expresidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Nancy Pelosi, y la senadora Tammy Duckworth. También se reunió con miembros de la comunidad taiwanesa. Esta vez, no está claro si tendrá discusiones de tan alto nivel.
La respuesta de Beijing
Cuando faltan unos cinco meses para que Taiwán celebre sus elecciones presidenciales muy disputadas, las paradas de tránsito de Lai llegan en un momento delicado para Taipei, Beijing y Washington.
Lai siempre ha liderado la mayoría de las encuestas de opinión, pero su historial de caracterizar a Taiwán como un estado soberano ha aumentado la desconfianza del gobierno chino hacia él.
China ve a Taiwán como una parte inseparable de su territorio y se ha opuesto durante mucho tiempo a un compromiso de alto nivel entre funcionarios de Taiwán y otros países. En los últimos años, Beijing ha aumentado la frecuencia de despliegue de aviones de combate y embarcaciones navales en la zona de identificación de defensa aérea de Taiwán o cruzando la línea media del Estrecho de Taiwán, que sirve como una demarcación no oficial entre Taiwán y China.
Durante el año pasado, China realizó dos ejercicios militares a gran escala alrededor de Taiwán en respuesta a las visitas, uno después de la visita de Pelosi a Taipei en agosto de 2022 y nuevamente en abril cuando la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, se reunió con el presidente de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Kevin McCarthy, en California.
Después de la escala de Tsai en California y la reunión con McCarthy y otros legisladores estadounidenses, Beijing organizó un ejercicio militar de varios días al estilo bloqueo alrededor de Taiwán.
Esta vez, los expertos creen que Beijing lanzará una respuesta militar a las escalas de Lai en los EE. UU., pero la escala dependerá de cuán «aspecto oficial» sea su viaje. “Esto incluye con quién se reúne, qué dice y qué tan públicas son esas reuniones”, dijo a la VOA Amanda Hsiao, analista senior de China en International Crisis Group.
Mientras Taiwán se prepara para las elecciones presidenciales, dijo Hsiao, Beijing intentará moderar su respuesta a las paradas de tránsito de Lai, ya que cualquier reacción que se considere demasiado provocativa podría ayudar a aumentar las posibilidades de que Lai gane las elecciones. Sin embargo, agregó que a Beijing también le preocupa enviar una señal equivocada si sus respuestas se consideran demasiado débiles.
“Pueden responder con un ejercicio militar a pequeña escala, y puede ser simplemente un aumento en lo que ya hacen casi a diario”, dijo.
China ha desplegado 79 aviones militares y 23 buques de guerra en áreas cercanas a Taiwán desde el domingo, según el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán. Entre ellos, 25 naves militares han cruzado la línea media del Estrecho de Taiwán o se han entrometido en las zonas de identificación de defensa aérea del suroeste y sureste de Taiwán.
Dando una buena impresión
Para Lai, el viaje es una oportunidad para causar una buena impresión y sus posiciones sobre las relaciones con China y EE. UU. son claras.
Antes de partir para el viaje, en una entrevista con la emisora taiwanesa SETN, Lai enfatizó que Taiwán no es parte de China, expresó su voluntad de “ser amigo” de China y destacó la importancia de la relación de Taiwán con los Estados Unidos.
“Rechazar a nuestro mejor socio, Estados Unidos, sería imprudente”, dijo.
Los analistas dicen que Lai ha heredado en gran medida los «cuatro compromisos» presentados por la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, en 2021, que se centran en defender el sistema democrático de Taiwán, salvaguardar la soberanía de Taiwán, rechazar la presión de China y dejar que el pueblo de Taiwán determine el futuro de la isla.
“El enfoque de Tsai se ha ganado el reconocimiento internacional, por lo que es un enfoque seguro para Lai y el Partido Progresista Democrático”, dijo Chen de la Universidad de Soochow a la VOA.
Nachman, de la Universidad Nacional Chengchi, dijo que cree que Lai debería seguir tratando de causar una buena impresión en el gobierno de Estados Unidos.
“Necesita demostrar que puede ser ‘Tsai Ing-wen 2.0’, y este viaje es una de las grandes pruebas”, dijo a la VOA.
Crédito: Voz de América
