Hace apenas dos días, Nicolás Petro, hijo del presidente colombiano Gustavo Petro, anunció un acuerdo con la Fiscalía en el que se comprometía a revelar hechos relevantes para la Justicia. Este jueves 3 de agosto, finalmente, cumplió su promesa al confesar que «sí recibió altas sumas de dinero» de dos personas: el exnarcotraficante Samuel Santander Lopesierra, conocido como «El Hombre Marlboro», y Óscar Camacho, hijo del polémico contratista Alfonso «El Turco» Hilsaca.
Según el informe de la Fiscalía, durante el interrogatorio, el hijo de Gustavo Petro proporcionó «información relevante» sobre la financiación de la pasada campaña presidencial del actual mandatario, donde aparentemente se habrían superado los topes mínimos permitidos por ley. Parte de estos fondos no había sido reportada ante las autoridades competentes.
La confesión ha sido un golpe inesperado para la Casa de Nariño, a pesar de los intentos del presidente colombiano de desvincularse del escándalo. Inmediatamente después de la detención de su hijo, Gustavo Petro mostró su apoyo a las investigaciones, pero ese gesto no ha sido suficiente para aplacar las críticas.
La exesposa de Nicolás Petro, Day Vásquez, ya había adelantado lo que ahora ha confirmado su expareja. Ella aseguró ante la Fiscalía que parte del dinero recibido ingresó a la campaña del Pacto Histórico, lo que agrava aún más la crisis para el gobierno de Gustavo Petro.
Nicolás Petro admitió que una parte de esos fondos «fue invertida en la campaña presidencial del año 2022» y se comprometió a proporcionar «documentación y audios que respalden sus declaraciones». Esta colaboración podría resultar en una detención domiciliaria como moneda de cambio, mientras que Day Vásquez, al parecer, no enfrentaría privación de libertad.
Success
You are now signed up for our newsletter
Success
Check your email to complete sign up
Por su parte, el presidente Petro sigue afirmando que él desconocía las operaciones ilegales de su hijo. «Jamás he conducido a mis hijos al delito. Jamás me favorecería del delito de alguno de ellos. Mi vida politica está en función de la justicia social y la Paz de Colombia», expresó este jueves en sus redes sociales.
Este nuevo escándalo sin dudas ha afectado aún más la ya debilitada gestión del mandatario izquierdista.
