Un perro regala lealtad, compañía incondicional y una profunda capacidad de captar las emociones de sus dueños. Un vínculo irrompible entre animal y hombre que una vez más fue demostrado, con el caso de un niño perdido.
“El perro es el mejor amigo del hombre”, es una afirmación respaldada por un estudio científico. Además de ello, deja claro que la relación entre una persona y su perro, es similar a la de una madre humana con su hijo.
Así es el caso de Franklin Orwig III, un pequeño de tan solo 4 años, que fue rescatado en medio de una zona boscosa tras ser reportado como desaparecido. Esto ocurrió en el condado Brevard, en Florida, y afortunadamente, el menor no estaba solo.
¿Qué fue lo que ocurrió?
El padre de Frank Orwig, dijo a la policía que alrededor de las 9 de la mañana del viernes 10 de febrero, su hijo estaba jugando en su iPad. El hombre aprovechó de acostarse a descansar, pero tras pasar unos minutos, se dio cuenta de que el niño no estaba.
“Ni siquiera estuve dormido 35 minutos. Luego me levanto, lo busco, no estaba en la casa y me estoy volviendo loco”, expresó el padre a la policía.
Rescate del niño en marcha
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El Equipo de Respuesta a Secuestros de Niños de la Oficina del Sheriff del Condado de Brevard, inició las labores de búsqueda. Habilitaron un helicóptero para rastrear la ubicación del infante por tierra y por aire.
Se activó una intensa búsqueda para dar con el menor. Posteriormente, el piloto del helicóptero junto con un oficial de vuelo táctico, lo avistaron. El niño estaba en un área boscosa, en compañía de su perro.
“Corrí hacia él y ni siquiera lo dejé ir, estaba llorando mucho”, dijo Frank Orwig padre tras el hallazgo del pequeño.
Su fiel amigo Rufus
El niño nunca estuvo solo durante el tiempo que se reportó como desaparecido. En todo momento contó con la compañía de su perro «Rufus». De hecho, el can estaba junto a él al momento del rescate.
De esa manera se pudo comprobar una vez más el nivel de fidelidad que alcanzan las mascotas. Ante una situación de peligro, como fue el ingreso del niño a la zona boscosa, su perro hizo lo propio, como todo un guardián.
Rufus no se alejó del lado del pequeño hasta que sintió que los dos estaban a salvo.
Un peludo fiel estará al lado de su humano siempre. Sin importar la situación, brindará su protección y amor sincero, como lo hizo Rufus con su amo.