Las perspectivas de un enfrentamiento entre los Estados Unidos y sus aliados de la OTAN y la nación de China dieron el siguiente paso para convertirse en realidad después de que se filtrara a los medios de comunicación un memorando escrito por un general de cuatro estrellas de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
El jefe del Comando de Movilidad Aérea (AMC), el general Mike Minihan, ordenó a sus subordinados que no solo se prepararan para un conflicto con China a partir de 2025, sino que «informaran todos los esfuerzos importantes para prepararse para la lucha contra China… antes del 28 de febrero», según NBC News.
El Memorándum, que según NBC se emitió el 27 de enero y se filtró a su compañía el mismo día, se describió como “dirigido a todos los comandantes de ala aérea en el Comando de Movilidad Aérea y otros comandantes operativos de la Fuerza Aérea”.
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La AMC contiene casi 50.000 miembros y controla cerca de 500 aviones, principalmente para logística en las áreas de transporte y reabastecimiento de combustible.
El texto completo del Memorándum fue publicado el 30 de enero por la revista Air & Space Forces, que mostraba en qué se basaba el cálculo de la línea de tiempo de Minihan para 2025.
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“Las elecciones presidenciales de Taiwán son en 2024 y le darán una razón a Xi. Las elecciones presidenciales de Estados Unidos son en 2024 y le ofrecerán a Xi una América distraída”, afirmó.
El general agregó: “El equipo, la razón y la oportunidad de Xi están todos alineados para 2025”.
La aceleración del calendario de un posible conflicto entre dos de los países más críticos de la Tierra se produce pocas semanas después de conocerse que las infecciones y muertes por el Coronavirus de la Enfermedad de 2019 (COVID-19) se estaban descontrolando tras la publicación de las extremas medidas de bloqueo «Cero-COVID» de Xi Jinping.
Sin embargo, incluso a la luz de los acontecimientos recientes, las estadísticas oficiales del Partido Comunista Chino son irrealmente bajas. El régimen afirma que su país de 1.400 millones de habitantes y origen del SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19, solo ha sufrido 84.190 muertes por COVID desde que comenzó la pandemia.
La cifra asciende a una población ajustada de 50,94 muertes por 1 millón de personas.
En comparación, Estados Unidos y sus 332 millones de habitantes han informado 1,11 millones de muertes por COVID, o una población ajustada de 3274 muertes por cada millón de personas, una diferencia de un factor de más de 60.
A mediados de enero, el Maestro Li Hongzhi, el fundador de la práctica espiritual Falun Dafa, dijo a sus discípulos que la verdadera cantidad de muertes que China ha sufrido es la asombrosa cifra de 400 millones de personas.
La disciplina del Maestro Li ha sido el grupo más perseguido por el Partido Comunista Chino desde que el ahora fallecido presidente Jiang Zemin lanzó una campaña al estilo de la Revolución Cultural para aplastar a Falun Gong el 20 de julio de 1999, que ha empleado el crimen sin precedentes de la sustracción de órganos vivos.
Aunque muchos pueden encontrar la cifra de 400 millones demasiado aterradora de aceptar cuando se contrasta con la narrativa oficial de menos de 100.000 muertes, es razonable que el general Minihan sin duda estaría al tanto de los altos niveles de la Comunidad de Inteligencia de Estados Unidos y los informes de inteligencia militar que capturan una imagen más realista de la situación de la pandemia en China y cómo su efecto desestabilizador sobre el PCCh reinante de Xi son mucho más graves de lo que el público en general se le permite saber.
Y tal vez este mensaje se refleje en los mensajes de línea dura del General.
La NBC informó de que el memorando contenía verborrea cargada de bravuconadas, como decir al personal del AMC que «dispare un cargador contra un objetivo de 7 metros con el pleno entendimiento de que lo que más importa es la letalidad impenitente».
“Apunta a la cabeza”, agregó.
A los soldados y comandantes también se les dijo: “Corran deliberadamente, no imprudentemente”, y se les aconsejó: “Si se siente cómodo con su enfoque del entrenamiento, entonces no está tomando suficiente riesgo”.
El general Minihan también dijo a sus soldados que espera que para marzo «consideren sus asuntos personales y si se debe programar una visita con la oficina legal de su base de servicio para asegurarse de que estén legalmente listos y preparados» para las realidades de un campo de batalla.
Un plan de batalla concreto incluido en las instrucciones del general fue una instrucción para que la unidad de avión de carga KC-135 preparara un método para «entregar 100 UAV [drones de combate] de tamaño y tipo listos para usar desde un solo avión».
Aunque un portavoz del Pentágono le dijo a NBC: “Estos comentarios no representan la opinión del departamento sobre China”, un representante de AMC confirmó que el Memorándum era auténtico.
“Este es un memorando interno auténtico del General Minihan dirigido a sus equipos de mando subordinados. Su orden se basa en los esfuerzos fundamentales del Comando de Movilidad Aérea del año pasado para preparar a las Fuerzas Aéreas de Movilidad para futuros conflictos, en caso de que falle la disuasión”, dijeron a NBC.
El General también le dijo a su comando que el mensaje sería “la primera de 8 directivas mensuales de mi parte”.
“Necesitan saber que solo yo soy el dueño de la pluma en estas órdenes. Mis expectativas son altas y estos pedidos no se pueden negociar”, agregó.
Si bien el Pentágono ha hecho todo lo posible para distanciarse del memorando del general Minihan, Estados Unidos ha adoptado una postura de política exterior cada vez más agresiva desde que Xi Jinping estaba haciendo campaña y obtuvo su tercer mandato sin precedentes.
Según un informe del 29 de enero de Air & Space Forces Magazine, el secretario de prensa de la Fuerza Aérea, el general de brigada Patrick S. Ryder, declaró en respuesta a las preguntas sobre el edicto de 2025 del Memo: “La Estrategia de Defensa Nacional deja en claro que China es el desafío de ritmo para el Departamento de Defensa y nuestro enfoque sigue siendo trabajar junto a aliados y socios para preservar un Indo-Pacífico pacífico, libre y abierto”.
La redacción es especialmente acertada a la luz de un informe del 5 de diciembre de 2022 del crucial think tank Atlantic Council titulado Taiwán: La clave para contener a China en el Indo-Pacífico, cuyo párrafo introductorio afirmaba: «China es el desafío que marca el paso para Estados Unidos, planteando la amenaza global más consecuente para la seguridad de Estados Unidos y sus aliados».
A medida que China despliega sus músculos militares y económicos, el comportamiento cada vez más coercitivo de Beijing pone a prueba la defensa de sus vecinos, y de ninguno tanto como de Taiwán. Gran parte de la capacidad de Estados Unidos para impedir la proyección del poder chino en el Indo-Pacífico depende de su relación con Taiwán».
En una subsección titulada China como la amenaza que marca el ritmo, el autor John Barranco lamentó: “Sin embargo, el desafío de China no es solo de naturaleza militar o económica, también es ideológico y representa una seria amenaza para el orden global basado en reglas liderado por Estados Unidos”.
Barranco agregó que “China busca derrocar el equilibrio de poder tradicional, suplantando a Estados Unidos como el poder preeminente del mundo, y asegurar la estabilidad del régimen a través de los éxitos de la política interna y el establecimiento de la hegemonía regional en el Indo-Pacífico”.
“China ve a Taiwán como central para lograr todos sus intereses. Por lo tanto, Estados Unidos debería considerar este lente cuando elabore estrategias para disuadir a China y comprender cómo la defensa de Taiwán encaja en sus propios planes”, continuó.
