El Banco de Canadá -el banco central de Canadá- perdió 522 millones de dólares en el tercer trimestre de este año, lo que supone la primera pérdida de la institución financiera desde su creación hace 87 años, en marzo de 1935.
En su informe financiero trimestral más reciente, el banco dijo que sus ingresos por intereses de los activos no siguieron el ritmo de los cargos por intereses de los depósitos en el banco, que se han disparado debido a la rápida subida de los tipos de interés.
Las subidas de los tipos de interés en el último año han elevado el coste de los cargos por intereses que paga por los saldos de liquidación depositados en las cuentas de los grandes bancos, mientras que los ingresos que el banco recibe de los bonos del Estado que posee se mantuvieron fijos.
En el transcurso de la pandemia, el banco central aumentó drásticamente sus activos como parte de su programa de compra de bonos del Estado, también conocido como flexibilización cuantitativa. Esta política formaba parte de la estrategia del banco para estimular la economía.
La expansión de los activos fue el catalizador de la pérdida histórica, ya que el banco pagó los bonos del Estado con la creación de saldos de liquidación.
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La semana pasada, anticipándose a la pérdida, el gobernador del Banco de Canadá, Tiff Macklem, dijo al comité de finanzas de la Cámara de los Comunes de Canadá que las pérdidas no afectarán a la capacidad del banco central para dirigir la política monetaria.
Según CTV News, dijo: «Tras un periodo de pérdidas, el Banco de Canadá volverá a tener ganancias netas positivas».
El banco central busca ahora en el gobierno federal canadiense una solución para equilibrar sus cuentas.
Aunque existen opciones, los economistas afirman que el problema es en gran medida contable y no de política monetaria.
