Un funcionario de alto rango de la Unión Europea se ha jactado de que el gobierno “tendrá control” sobre el Twitter de Elon Musk si quiere permanecer en servicio en Europa, dejando en claro que la censura es cualquier cosa menos una teoría de la conspiración.
Los comentarios fueron hechos por el Comisionado de Privacidad, Therery Breton, en una entrevista con una emisora francesa, informó Bloomberg el 18 de noviembre.
Breton lamentó que Musk haya despedido a gran parte de la vieja guardia izquierdista de la empresa al tomar las riendas de su adquisición por 44.000 millones de dólares: “Está en proceso de reducir un cierto número de moderadores, pero tendrá que aumentarlos en Europa”.
El Comisario dejó en claro que solo se permitiría un régimen de censura en la UE si se sale con la suya cuando gritó que Musk «tendrá que abrir sus algoritmos».
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“Tendremos el control, tendremos acceso”, pregonó Breton.
Sus comentarios adquirieron un contexto más oscuro cuando terminó la oración con: “La gente ya no podrá decir tonterías”.
Bloomberg explica que la mano dura de Breton tiene dientes. La Ley de Servicios Digitales de la Unión (DSA) exige que las empresas de tecnología moderen y eliminen el contenido de acuerdo con los dictados del gobierno bajo pena de una multa de ventas anual del 6 por ciento o una prohibición total.
Breton agregó: “Él [Musk] sabe perfectamente cuáles son las condiciones para que Twitter continúe operando en Europa”.
El 16 de noviembre, Breton tuiteó un hilo sobre cómo la DSA entró en vigencia el mismo día, afirmando que «las plataformas de redes sociales ya no se comportarán como si fueran ‘demasiado grandes para que les importe'».
En el diálogo, Breton enumeró un plan de cuatro puntos que las empresas de redes sociales tendrían que cumplir:
- Divulgación de números de sus usuarios activos a los efectos de la clasificación de alcance
- Cumplimiento de la moderación del contenido y demostración de que siguen la narrativa del establecimiento.
- Instalación de un método de activación única para que los usuarios se delaten entre sí
- El nombramiento de «Coordinadores de Servicios Digitales» de los estados miembros, que actuarán en la misma línea que los miembros del Comité del Partido del Partido Comunista Chino instalados en varias empresas y lugares de trabajo para garantizar el cumplimiento de los edictos del régimen.
“Todos son bienvenidos a hacer negocios en la [UE], pero tendrán que seguir nuestras reglas”, dijo Breton.
Sin embargo, para Musk -un autodenominado «absolutista de la libertad de expresión»- en mayo, Elon le dijo a Breton en un video propagandístico publicado en Twitter que los dos estaban «muy de acuerdo» en lo que respecta a los requisitos pendientes de la DSA, ya que su acuerdo para comprar Twitter todavía estaba en marcha.
“Creo que estoy de acuerdo con todo lo que dijiste”, agregó Musk.
En cuanto a la esperanza de que el régimen de Musk suponga una mejora en materia de libertad de expresión respecto a los anteriores socialistas, esta suposición parece estar en duda.
El 18 de noviembre, Musk puso al mundo sobre aviso de que, aunque la «libertad de expresión» era la «nueva política de Twitter», eso no significa que si dices algo que los censores centrales desaprueban, otras personas puedan leerlo.
“La nueva política de Twitter es la libertad de expresión, pero no la libertad de alcance. Los tweets negativos/de odio se reducirán al máximo y se desmonetizarán, por lo que no habrá anuncios ni otros ingresos para Twitter. No encontrará el tweet a menos que lo busque específicamente, lo cual no es diferente del resto de Internet”, afirmó Musk.
En mejores noticias, el sábado 19 de noviembre, Musk restableció la cuenta del expresidente Donald Trump después de que una encuesta de Twitter del 18 de noviembre mostrara que la mayoría había votado a favor de levantar su bozal.
En una encuesta con más de 15 millones de votos, el 51,8 por ciento se decantó por restituir a Trump.
Musk afirmó que más de 134 millones de personas habían visto la encuesta.
