Por Soo-Hyang Choi y Hyonhee Shin
SEÚL (AP) — Corea del Sur se movió para calmar la indignación pública el martes por una fiesta de Halloween que mató a más de 150 personas, la mayoría jóvenes, prometiendo una investigación rápida e intensiva y pidiendo nuevas medidas de seguridad para prevenir desastres similares.
El número de muertos por aplastamiento en una concurrida fiesta callejera de Halloween el sábado subió a 156, con 151 heridos, 29 de los cuales estaban en estado grave. Al menos 26 ciudadanos de 14 países estaban entre los muertos.
Decenas de miles de juerguistas, muchos adolescentes y veinteañeros y disfrazados, se agolparon en las estrechas calles y callejones del popular distrito de Itaewon para las primeras festividades de Halloween prácticamente sin restricciones en tres años.
El jefe de seguridad del país, el ministro del Interior, Lee Sang-min, se disculpó el martes y prometió averiguar la causa del incidente y evitar que se repitan casos similares.
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“Como ministro que supervisa la seguridad del público, pido mis más sinceras disculpas por el incidente”, dijo Lee, y agregó que el gobierno tenía una “responsabilidad ilimitada sobre la seguridad de nuestro pueblo” mientras se dirigía a una sesión parlamentaria televisada en vivo.
Ha sido objeto de fuertes críticas públicas después de decir que desplegar más policías no habría evitado el desastre.
El alcalde de Seúl, Oh Se-hoon, también se disculpó entre lágrimas durante una rueda de prensa y dijo que el gobierno de la ciudad pondría todos los recursos administrativos disponibles “hasta que todos los ciudadanos puedan volver a sus vidas normales”.
El comisionado general de la Policía Nacional, Yoon Hee-Keun, reconoció el martes que el control de la multitud en el lugar era “inadecuado”, y señaló que la policía había recibido múltiples informes que advertían sobre posibles accidentes en la noche del desastre.
“La policía llevará a cabo rápida y rigurosamente inspecciones e investigaciones intensivas en todos los aspectos sin excepción para explicar la verdad de este accidente”, dijo Yoon en una conferencia de prensa.
El primer ministro Han Duck-soo dijo que la investigación en curso cubriría si las respuestas in situ de las agencias gubernamentales fueron adecuadas. Señaló las medidas institucionales inadecuadas para el manejo de multitudes como una causa del aumento mortal.
El presidente Yoon Suk-Yeol declaró una semana de luto nacional y dijo que el país ha tenido demasiados desastres de seguridad. Dijo que mejores respuestas eran críticas, incluido un mejor control de multitudes.
“Deberíamos idear medidas de seguridad concretas para manejar las multitudes, no solo en estas calles donde ocurrió este desastre masivo, sino en otros lugares como estadios y salas de conciertos donde se reúnen grandes multitudes”, dijo en una reunión de gabinete.
Todas las víctimas fueron identificadas y se instalaron altares conmemorativos en el ayuntamiento de Seúl y en el distrito de Itaewon, donde los ciudadanos presentaron sus respetos.
Información de Soo-Hyang Choi y Hyonhee Shin; Escrito por Jack Kim; Editado por Gerry Doyle y Jacqueline Wong
