Rusia eliminó la fecha límite del 3 de septiembre para reanudar los flujos de gas a través del gasoducto Nord Stream 1, una de las principales rutas de suministro a Europa, luego de decir que descubrió una falla durante el mantenimiento, lo que profundizó las dificultades de Europa para obtener combustible para el invierno.
Nord Stream 1, que corre bajo el Mar Báltico para abastecer a Alemania y otros países, debía reanudar sus operaciones después de una parada de tres días por mantenimiento el sábado a las 0100 GMT.
Pero Gazprom, la empresa estatal con el monopolio de las exportaciones de gas ruso a través de gasoductos, dijo el viernes que ya no podía proporcionar un plazo para reiniciar las entregas después de encontrar una fuga de petróleo que significaba que la turbina de un gasoducto no podía funcionar de manera segura.
Moscú ha culpado a las sanciones, impuestas por Occidente después de que Rusia invadiera Ucrania, de obstaculizar las operaciones de rutina y el mantenimiento de Nord Stream 1. Bruselas dice que esto es un pretexto y que Rusia está utilizando el gas como arma económica para tomar represalias.
Los precios del gas se han disparado, perjudicando a la industria y los hogares europeos, aumentando primero debido a la recuperación de la demanda después de la pandemia y luego subiendo aún más debido a la crisis de Ucrania.
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El viernes por la noche, Klaus Mueller, presidente del regulador de energía alemán Bundesnetzagentur, tuiteó que si bien Alemania estaba mejor preparada esta vez, ahora era esencial que todos «hicieran su parte» para ahorrar en el uso de gas.
Por Reuters. (Reporte de Tanya Wood, Petra Haverkamp)
