Un miembro de una célula del Estado Islámico involucrado en un complot de toma de rehenes que condujo a la decapitación de periodistas y trabajadores humanitarios estadounidenses fue sentenciado a cadena perpetua por un tribunal federal de EE. UU. el viernes 19 de agosto.
El juez federal de distrito TS Ellis condenó a El Shafee Elsheikh, de 33 años, durante una audiencia en un tribunal federal en Alexandria, Virginia, en un fallo que, según las familias y amigos de sus víctimas, proporcionó “un poco de justicia”.
Hace cuatro meses, un jurado encontró al ex ciudadano británico culpable de cargos que incluían toma letal de rehenes y conspiración para cometer asesinato. Fue declarado culpable en abril.
Después de un juicio de seis semanas en abril y horas de deliberación, el jurado concluyó que Elsheikh era parte de una célula de ISIS, apodada “The Beatles” por su acento inglés, que decapitó a los rehenes estadounidenses en Irak y Siria.
Elsheikh, que nació en Sudán y creció en Londres, fue acusado de conspirar para matar a cuatro rehenes estadounidenses: James Foley, Steven Sotloff, Peter Kassig y Kayla Mueller.
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Foley y Sotloff, ambos periodistas, y Kassig, un trabajador humanitario, fueron asesinados en decapitaciones grabadas en video. Mueller fue violada repetidamente por el líder del grupo en ese momento, Abu Bakr al-Baghdadi, antes de su muerte en Siria, dijeron funcionarios estadounidenses.
Las muertes de Foley, Sotloff y Kassig se confirmaron en 2014; La muerte de Mueller se confirmó a principios de 2015.
Hablando con los periodistas después de la sentencia, la madre de Foley, Diane, dijo: “Pero a pesar de lo agradecida que estoy por esta sentencia, es una victoria vacía. Nuestro país ha perdido a cuatro de sus mejores ciudadanos. Las familias perdimos a nuestros seres queridos para siempre. Y ahora El Sheikh y Cody han perdido su libertad, su país y sus familias. Es un ciclo trágico de violencia y angustia para todos los involucrados”.
Los cargos contra Elsheikh, cuya ciudadanía británica fue retirada en 2018, conllevaban una posible sentencia de muerte, pero los fiscales estadounidenses habían advertido previamente a los funcionarios británicos que no buscarían la pena de muerte.
Los fiscales argumentaron que se necesitaba una cadena perpetua para evitar que Elsheikh causara daños en el futuro y sentar un precedente de que tales delitos recibirán un castigo estricto.
Otro miembro de la célula, Alexanda Kotey, fue sentenciado a cadena perpetua por un juez estadounidense a principios de este año. Kotey estuvo retenido en Irak por el ejército estadounidense antes de ser trasladado en avión a Estados Unidos para ser juzgado. Se declaró culpable en septiembre pasado de los asesinatos de Foley, Sotloff, Kassig y Mueller.
Un tercer miembro del grupo, Mohammed Emwazi, murió en un ataque con misiles estadounidense-británico en Siria en 2015.
Por Reuters.
(Producción: Greg Savoy, Kristin Neubauer)
