El presidente de Francia Emmanuel Macron se impuso este domingo en las elecciones generales, pero deberá ir a una segunda vuelta contra la candidata de la derecha Marine Le Pen, en lo que será una reiteración del ballotage del 2017.
Con el 97% escrutado, Emmanuel Macron se impone con el 27,6% de los votos, Marine Le Pen le sigue con el 23,4% y en tercer lugar se ubica el izquierdista Jean-Luc Melénchon, con el 22%.
En cuarto lugar quedó Éric Zemmour, también de derecha, quien en algún momento llegó a sondear en segundo puesto, pero finalmente terminó perdiendo votos de la derecha contra Le Pen.
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¿Esta vez podría ganar la derecha?
Para el ballotage del 2017, Macron consiguió el apoyo de Los Republicanos, del Partido Socialista y hasta del izquierdista Melénchon, así que terminó ganando en segunda vuelta por un amplio margen. Se impuso por el 66% de los votos, mientras que todos los demás partidos se unieron en contra de Le Pen.
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Pero tras cuatro años de Macron, en el que muchos ciudadanos están insatisfechos con su gestión, el escenario es muy diferente.
La izquierda no tiene la misma predisposición para apoyar a Macron, el candidato del establishment. De hecho, no todos saben que el líder de la izquierda Melénchon fue uno de los principales promotores de las manifestaciones de los «chalecos amarillos». Este grupo -que se denominó de esta manera por portar los característicos chalecos de trabajo- sostuvo protestas cada fin de semana durante tres años en contra del gobierno.
Tras conocerse los resultados, Melénchon volvió a repetir lo mismo que dijo en 2017, que “ni un voto nuestro debe ir hacia Le Pen”. Pero todo indica que esta vez su base de votantes no le va a ser tan obediente y va a votar por Le Pen o se va a abstener, lo cual también beneficia a la candidata preferida de la derecha.
Además, la mayoría de los seguidores de Melénchon se oponen a las draconianas medidas de confinamiento y de los pasaportes sanitarios impuestos por Macron durante la pandemia, al igual que Le Pen, que siempre votó en contra de estas medidas y aboga por proteger los derechos y las libertades individuales.
Veremos qué sucederá en la próxima vuelta que tendrá lugar el próximo domingo 24 de abril, pero al parecer, no todo está dicho.
Tras los resultados de la segunda vuelta, el Consejo Constitucional debe ratificar o confirmar los datos el 28 de abril que permitirán proclamar nuevo presidente de Francia.
Sin embargo, la ley francesa establece que hasta el último día del mandato del presidente saliente no se debe realizar el traspaso de poderes.
Finalmente, el nuevo período de gobierno comenzará el 13 de mayo de 2022.
