El presidente de Rusia Vladimir Putin anunció sanciones contra la cúpula de EE. UU. y Canadá, afectando directamente al círculo íntimo de Joe Biden.
“En respuesta a una serie de sanciones sin precedentes que prohíben, entre otras cosas, la entrada en Estados Unidos de altos funcionarios de la Federación Rusa, a partir del 15 de marzo de este año, el Presidente Biden, el Secretario de Estado A. Blinken, el Secretario de Defensa L. Austin y el Jefe del Estado Mayor Conjunto M. Milley, así como una serie de jefes de departamento y personalidades estadounidenses muy conocidas se suman a la «lista de exclusión» rusa de forma recíproca”, comunicó el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.
Las sanciones contra miembros de la cúpula de EE.UU. alcanzan también a personas asociadas a los altos funcionarios.
La “lista negra”, como la llama la parte rusa, incluye también al hijo de Joe Biden, Hunter Biden, la ex secretaria de Estado Hillary Clinton, el director de la CIA William Burns, y el Asesor de Seguridad Nacional Jake Sullivan.
Por último se incluye a Jennifer Rene Psaki, Secretaria de Prensa de la Casa Blanca; Daleep Singh, Asistente Adjunto del Presidente de los Estados Unidos para la Seguridad Nacional; Samantha Jane Power es directora de la Agencia para el Desarrollo Internacional; Adewale Adeyemo, Subsecretario Primero del Tesoro; y Reta Jo Lewis, presidenta y presidenta del consejo de administración del Banco de Exportación e Importación.
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De acuerdo con la declaración rusa, las sanciones son una consecuencia inevitable del rumbo extremadamente rusófobo adoptado por la actual Administración estadounidense, que, en un intento desesperado de preservar la hegemonía norteamericana, apostó por una contención frontal de Rusia.
La prohibición fue en respuesta a las sanciones impuestas por la Casa Blanca a los funcionarios rusos en medio de la invasión rusa de Ucrania.
La Cancillería rusa agregó más tarde al primer ministro canadiense Justin Trudeau a la lista de personas sancionadas.
Sin embargo, el ministerio ruso dijo que las sanciones no impedirán los contactos de alto nivel necesarios para las personas afectadas.
Tras la aplicación de las sanciones la reacción de la administración Biden no se hizo esperar.
La Casa Blanca se burló del Kremlin, diciendo que había metido la pata en la imposición de sanciones al presidente Joe Biden, y que las medidas no supondrán ninguna diferencia para los funcionarios estadounidenses que no tengan cuentas bancarias rusas.
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, que también figuraba en la lista, se rió de ellos.
“Ninguno de nosotros está planeando viajes turísticos a Rusia y ninguno de nosotros tiene cuentas bancarias a las que no podamos acceder, así que seguiremos adelante».
La medida impide a los sancionados entrar en Rusia y congela los activos que tengan allí, según la BBC.
Las sanciones afectan principalmente a la familia Biden, que ha tenido extensas actividades financieras en Rusia, según Derecha Diario.
El hijo del Presidente Biden, Hunter Biden, es co-fundador de la financiera Rosemont Seneca, que operó por años en Rusia, y según un informe del Senado de los Estados Unidos, recibió 3,5 millones de dólares de Elena Baturina, la mujer del alcalde de Moscú.
Los sancionados tampoco podrán entrar a Rusia con lo cual nuevamente quedará afectado Hunter Biden, quien se comprobó que trabajaba en Rusia, Ucrania y Bielorrusia vendiendo reuniones privadas con su padre cuando era vicepresidente.
Esta conducta es ilegal en Estados Unidos y se considera tráfico de influencias.
Los países occidentales ya han sancionado a altos cargos rusos, como el presidente Vladimir Putin, el ministro de Asuntos Exteriores Sergei Lavrov y el secretario de prensa del Kremlin Dmitry Peskov.
El martes 16 de marzo, EE. UU. anunció sanciones a 11 responsables de defensa rusos y señaló que podría imponer sanciones a Alexander Lukashenko, presidente de Bielorrusia, país aliado de Moscú.
Anteriormente, el Reino Unido sancionó a otras 370 personas rusas, incluido el ex dirigente ruso Dmitri Medvédev.
En su declaración, la parte rusa también dijo que en breve se anunciará la ampliación de la lista de sanciones para incluir a altos funcionarios estadounidenses, oficiales militares, legisladores, empresarios, expertos y personalidades de los medios de comunicación que sean rusófobos o hayan promovido el discurso de odio contra Rusia y la imposición de medidas restrictivas.
