Puede que mucha gente sueñe con vivir como un rey (o una reina) cuando fantasea con un poco de aventura en su vida, pero eso no suele ser posible a menos que se nazca en una familia real. Afortunadamente, un pueblo del norte de Inglaterra ha dado nueva vida a ese sueño ofreciendo una isla junto con un título de trabajo que te hace parecer un gobernante del Juego de Tronos.
En una pequeña isla dominada por un castillo de los años 1300 y una casa pública de más de 300 años, frente a la península de Furness, un consejo inglés está dispuesto a entregar el trono de la solitaria Isla Piel al candidato adecuado, si cumple los requisitos.
Al ser el único negocio de la isla, el Ship Inn busca un propietario que tenga la pasión ardiente de dirigir un pub y reinar sobre la carismática parcela de 50 acres. En cuanto a la mencionada realeza, también está incluida en el trato, y casi será oficial.
El Barrow Borough Council -la autoridad local que supervisa la isla- afirma que el primer propietario documentado, Edward Postlethwaite, ejerció su cargo entre 1746 y 1766. Desde el siglo XIX, por alguna «razón», el título de «Rey de Piel» se otorga a quien ocupa el cargo.
Para estar a la altura del prestigioso título, también se estableció un rito de iniciación: el nuevo líder se sienta en una silla antigua mientras se pone un casco y sostiene una espada oxidada, y se le vierten cubos de cerveza sobre la cabeza. Curiosamente, tanto el título como el rito siguen vigentes hoy en día, por lo que el candidato ideal puede empaparse plenamente de esta tradición de 300 años.
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Tras la finalización anticipada del contrato de arrendamiento del anterior «señor», en 2021 se formó una organización de asociación temporal entre el gobierno local y una empresa de pubs para garantizar que el importante hito histórico siga funcionando. Ahora, el ayuntamiento de Barrow-in-Furness (la ciudad local) vuelve a buscar a su próximo «rey» para que tome el timón y dirija el pub.
«La isla de Piel es un lugar único y cualquier operador debe valorar las limitaciones que ofrecen la energía, el clima, el acceso y su ubicación dentro de una zona de interés científico especial», reza un informe dirigido a los concejales.
Desde hace 40 años, John Murphy dirige los paseos a la isla, y declaró a The Guardian que la isla cobra sólo una fracción del coste de un hotel de bajo costo y esto ha sido fundamental para atraer a grandes cantidades de visitantes a las «estancias». Funciona un servicio de ferri y, durante la marea baja, los paseos guiados por la arena llevan a los visitantes entre las orillas. Además, la isla de Piel está a sólo 20 minutos de los alrededores del Distrito de los Lagos, y a poca distancia de la isla de Walney y sus playas.
Murphy subraya que quien consiga el puesto deberá tener una «enorme dedicación», ya que dirigir el pub y cuidar la isla no es tarea fácil.
Sobrellevar la soledad en la solitaria isla, que permanece cerrada durante la temporada baja, es sin duda un factor vital. «No se puede ir a Tesco a por una barra de pan cuando se está en la Isla de la Piel», señala Murphy. «Hay que tener dedicación y una gran pasión por el aislamiento y la tranquilidad. Hace falta una personalidad especial».
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En esta línea, Sandra Baines, jefa de economía y cultura de los visitantes del consejo, dijo a la BBC que el trabajo quizás «no es el sueño que la gente podría pensar que es». Bueno, nadie dijo que ser un rey (o una reina) fuera fácil y definitivamente no es para los débiles de corazón.
Sin embargo, la cosa se pone mucho más interesante: como «Rey de Piel» elegido, uno tendría que gestionar el bar, trabajar con servicios como el ferry y las excursiones guiadas, y mantener la isla con su propio dinero (excepto para emergencias o reparaciones esenciales, de las que se encargará el pueblo).
Lo que puede atraer a un aspirante a rey como una oportunidad emocionante, tiene muchas responsabilidades desalentadoras. Desde enfrentarse a un clima incierto hasta el aislamiento total, pasando por tener que trabajar muchas horas, puede que no sea el tipo de vida de ensueño que uno habría imaginado al ser coronado rey o reina de la isla.
Sin embargo, no todo es tan sombrío, ya que el rey o la reina puede encontrar alegría en las pintorescas vistas de una isla, donde se pueden observar focas y pájaros mientras se disfruta de impresionantes puestas de sol. «Las vistas desde Piel son increíbles», añade Murphy. «Debo haber dormido en cada brizna de hierba de esa isla, borracho o sobrio, y me encanta».
El castillo se construyó inicialmente con el objetivo de mantener a raya a los invasores escoceses. En 1487, unos 8.000 mercenarios dirigidos por Lambert Simnel desembarcaron aquí y avanzaron sobre Londres en un intento de derrocar al rey Enrique VII y hacerse con el trono de Inglaterra. Esta maniobra se llevó a cabo ya que Simmel, según se decía, era el legítimo heredero y verdadero conde de Warwick. Sin embargo, el rey Enrique no fue derrocado; los invasores fueron derrotados en la batalla de Stoke Field, poniendo fin a las Guerras de las Rosas.
No todos los días se encuentra una «oportunidad de trabajo» tan increíble en una isla de ensueño y encantadora. Así que, si hace tiempo que sueñas con gobernar como un rey, ¡ésta es tu oportunidad única en la vida!
