La revista estadounidense TIME comunicó el martes 7 de diciembre que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ganó la encuesta de lectores sobre la Persona del Año 2021, que eventualmente lo colocaría en la portada de la publicación.
«De los más de 9 millones de votos emitidos por lectores para quienes creen que es la persona o grupo que tuvo la mayor influencia en el año, para bien o para mal, Bolsonaro recibió el 24% de los votos», informó la revista. En segundo lugar quedó el expresidente de EE. UU., Donald Trump, con un 9%.
A pesar de haber ganado ampliamente el voto popular, la última palabra la tienen los editores de la revista, quienes anunciarán su decisión el 13 de diciembre revelando cuál fue, a su criterio, el personaje de 2021. Ante esto, Bolsonaro solicitó que se respete el resultado de la elección.
La revista TIME es de tendencia izquierdista, por lo que es muy probable que no destaque al líder conservador como ganador reemplazándolo por otra figura, o que bien lo coloque con un sesgo negativo, tal la aclaración en su nota de prensa que dice que la persona del año puede ser influyente «para bien o para mal». En su comunicado, también destacó varios puntos negativos de Bolsonaro y ninguno positivo respecto su gestión.
Uno de los puntos que critica la revista TIME fue su tratamiento respecto a la pandemia de Covid-19.
Success
You are now signed up for our newsletter
Success
Check your email to complete sign up
En este sentido, un informe basado en una investigación emitida por un grupo de senadores brasileños el 20 de octubre recomendó acusar al presidente Jair Bolsonaro de «crímenes de lesa humanidad» por su manejo de la pandemia COVID-19, motivo por el cual la prensa de todo el mundo ha criticado al líder conservador.
Desde el inicio de la pandemia en Brasil se han perdido más de 600.000 vidas, que corresponden al 0,29 % de la población brasileña, la cual supera los 210 millones de habitantes.
Un analista político independiente en Brasilia dijo al New York Times: «No vi [en el informe] ningún elemento concreto que fuera lo suficientemente fuerte como para acusar al presidente de genocidio u homicidio» y señaló que siete de los once miembros del Comité del Senado responsables del informe eran rivales políticos de Bolsonaro.
Como Brasil es una república federal, los estados tienen autonomía en cuanto a decisiones en sus territorios. Fue así como la Corte Suprema de Brasil le dio la a los gobernadores las atribuciones necesarias para imponer sus propias políticas de confinamiento y vacunación, sin embargo a ellos no se los acusa de las muertes.
Otro punto importante a destacar sobre la popularidad de Bolsonaro es que Brasil fue el primer país del continente cuya economía logró recuperarse de los efectos de los confinamientos e incluso volvió en tiempo récord a los niveles de crecimiento de su producto bruto interno (PBI) previos a la pandemia, por lo que sus políticas no fueron rechazadas por el pueblo, sino que muchos salieron a la calle para apoyar a su presidente.
Lucha contra la izquierda y otros poderes
Desde que asumió la presidencia en Brasil en 2019, Jair Messias Bolsonaro se opuso a los poderes ocultos, a la izquierda y a la agenda globalista, lo que lo hizo ganarse muchos enemigos, entre ellos, los medios de comunicación.
En los 15 años en el poder del Partido de los Trabajadores de Lula Da Silva, convivió una híbrida alianza entre la izquierda brasileña, los poderes fácticos, el comunismo chino y las empresas globalistas.
Es por eso que este statu quo que reinaba en Brasil entró en pánico a fines de 2018 ante el avance en la intención de voto de Jair Bolsonaro, por entonces un candidato con muy pocos recursos, y con un discurso simple pero contundente.
LEE MÁS: Bolsonaro ratifica su postura: Brasil no tendrá pasaporte sanitario
Finalmente, el líder conservador logró imponerse en las elecciones con la promesa de luchar contra la corrupción, ejercer mano dura contra la delincuencia y bajar los impuestos y las regulaciones para que despegue la actividad económica.
Pero, una vez instalado en Brasilia, las cosas no fueron sencillas y siempre tuvo que lidiar con un Congreso hostil.
De cara a unas nuevas elecciones presidenciales en 2022, donde se perfila como favorito, la pelea es más feroz que nunca. ¿Podrá lograrlo Bolsonaro? El pueblo parece apoyarlo. Si hay transparencia en las elecciones, es muy probable que pueda asumir un nuevo mandato.
