El candidato chino para representar a Interpol, Hu Binchen, ha sido objeto de críticas, ya que varios organismos internacionales han denunciado su candidatura.
La resistencia mundial se produjo tras los temores relativos a la seguridad de miles de opositores políticos chinos, que podrían correr peligro en caso de que Hu fuera elegido.
Una candidatura opuesta
Hu Binchen, funcionario de seguridad del Ministerio de Seguridad Pública de Beijing, es uno de los tres candidatos que optan a la delegación de Asia en el comité ejecutivo de Interpol, que supervisa la política y la dirección de la organización y el trabajo de la secretaría general.
Su candidatura al comité ha provocado la indignación internacional de múltiples políticos y activistas, que temen que el nombramiento de Hu pueda permitir al Partido Comunista chino (PCCh) «hacer un mal uso de los poderes y las bases de datos del organismo policial», y poner en peligro la vida de innumerables disidentes chinos.
Interpol es la red policial internacional formada por 194 países miembros, y cuenta con bases de datos que dan acceso a información que podría utilizarse para combatir el terrorismo y las actividades delictivas.
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Las elecciones al Comité Ejecutivo de Interpol se celebrarán entre el martes y el jueves de esta semana, en Ankara (Turquía), sobre la base de «un país, un voto».
La Alianza Interparlamentaria sobre China (IPAC), un grupo internacional de legisladores, envió una carta a los respectivos gobiernos de todo el mundo como parte de su objetivo de fomentar la oposición contra los movimientos de Beijing.
En ella se lee: «Al elegir a Hu Binchen para el Comité Ejecutivo, la Asamblea General… pondría en un riesgo aún mayor a las decenas de miles de disidentes hongkoneses, uigures, tibetanos, taiwaneses y chinos que viven en el extranjero».
La carta fue redactada por 50 legisladores de 20 países, entre ellos el senador estadounidense Marco Rubio (republicano de Florida), el representante Mike Gallagher (republicano de Wisconsin), Reinhard Butikofer, del Parlamento Europeo, y otros legisladores del Reino Unido y Australia, país este último en el que varios diputados se sumaron a la oposición a la postura de Hu.
También se critica el sistema de «notificaciones rojas» de Interpol, que son solicitudes utilizadas «para localizar y detener provisionalmente a una persona a la espera de su extradición». También se dice que el PCC ha «abusado repetidamente» de estas difusiones rojas como medio para perseguir a los disidentes y hacer que sean devueltos a China.
Además, 40 activistas, entre ellos el activista uigur Dolkun Isa y el activista de Hong Kong Nathan Law, escribieron otro llamamiento en el que afirmaban que la elección de Hu tendría «graves consecuencias» para otros activistas que se esconden de la persecución.
Tanto el IPAC como los activistas citaron la detención de Idiris Hasan en Marruecos en julio, después de que el régimen comunista presentara una notificación roja, ahora eliminada. La anulación de la notificación roja por parte de Interpol llevó a afirmar que la organización no protegió «contra el uso indebido del sistema por parte de China».
La carta de los activistas afirmaba que el puesto de Hu en la elección «pone aún más de relieve la preocupación que existe desde hace tiempo sobre la utilización por parte de China de posiciones de liderazgo para ganar influencia en [Interpol], lo que en el pasado ha dañado su reputación y supuestamente ha amenazado su neutralidad política».
Hace tiempo que se acusa a Beijing de cometer atrocidades contra los musulmanes uigures de Xinjiang (China), aunque el partido comunista ha negado todas las acusaciones.
El comisario de la Oficina de Investigación Criminal de Taiwán, Huang Chia-lu, pidió apoyo para que la República de China (ROC) entre en Interpol para oponerse a las ambiciones de China.
Palabras de una esposa preocupada
La esposa del ex jefe de Interpol Meng Hongwei, Grace Meng, dijo en una entrevista a The Associated Press (AP) que temía que Hu Binchen pudiera correr la misma suerte que su marido.
Meng estaba de viaje en China desde Francia en 2018 cuando luego desapareció y fue condenado a 13,5 años de prisión tras ser acusado de soborno bajo la represión anticorrupción del presidente Xi Jinping.
Hu ha trabajado como subdirector general del departamento de cooperación internacional de Beijing. Su candidatura para el puesto en el Comité Ejecutivo de Interpol se produjo tres años después de la desaparición de Meng Hongwei, ex presidente de Interpol que en su día fue muy amigo de Hu.
Grace Meng tildó al Partido comunista chino [y a sus dirigentes] de «monstruo» que «come niños».
