Nueve escuelas en North Ayrshire de Escocia en el Reino Unido han implementado sistemas de pago por reconocimiento facial en cafeterías de estudiantes a partir del 18 de octubre. La compañía que suministra hardware y software para el despliegue dice que el propósito es acelerar la entrega de alimentos.
“En una escuela secundaria, tienes alrededor de un período de 25 minutos para atender potencialmente a 1.000 alumnos. Por eso, necesitamos un rendimiento rápido en el punto de venta”, dijo a Financial Times (FT) David Swanston, director ejecutivo de CRB Cunninghams .
El FT dice que las escuelas británicas «han utilizado otros sistemas biométricos, como escáneres de huellas dactilares, para aceptar pagos durante años». El medio también dijo que CRB afirma que su sistema es «más seguro con el Covid» que los pagos con tarjeta y los escáneres de huellas dactilares.
El sistema almacena una «plantilla de impresión encriptada» localmente en los servidores de la escuela para comparar a los alumnos con su base de datos biométrica.
En una página de promoción de ventas en el sitio web de la compañía, un empleado demostró cómo funciona el sistema durante una feria comercial celebrada el 14 de octubre. A los estudiantes se les presenta un quiosco de pedidos de alimentos que está equipado con una cámara. El operador puede demostrar la rapidez con la que la máquina compara un rostro con su base de datos para procesar el pago.
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El Consejo de North Ayrshire se mostró afirmativo de la tecnología en comentarios a FT: «Los alumnos a menudo olvidan sus PIN y, lamentablemente, algunos también han sido víctimas de fraude de PIN, por lo que apoyan los desarrollos planificados y aprecian los beneficios para ellos».
Afirmaron que el 97 por ciento de los niños o sus padres habían dado su consentimiento para el uso de la tecnología, que debe ser optado.
Una hoja de preguntas frecuentes en el sitio web del gobierno dice que ninguna otra agencia puede acceder a los datos, que se eliminan cuando los niños se gradúan o abandonan la escuela.
También señala que, como alternativa, los estudiantes pueden pagar sus comidas mediante el uso de un PIN.
Sin embargo, en la Declaración de aviso de privacidad del gobierno, clasifica los datos biométricos como «Datos de categoría especial», que se exponen como «relacionados con el procesamiento de datos personales con respecto al origen racial/étnico, opiniones políticas, creencias religiosas o filosóficas, afiliación sindical, datos genéticos, datos biométricos, datos relacionados con la salud o datos relacionados con la vida sexual u orientación sexual de una persona».
Señala que la base legal para la captura de estos datos son «razones de interés público sustancial» o mediante el consentimiento.
El documento señala que los datos se pueden compartir con el gobierno escocés, contratistas externos, guarderías privadas, trabajadores sociales y el Comisionado de Información del Reino Unido, entre otros.
«Educación también hará las revelaciones requeridas por la ley y podrá compartir la información con otros organismos responsables de la detección/prevención del fraude o de la auditoría/administración de los fondos públicos», reza el Aviso.
También establece que el Consejo «solo conservará los datos personales de una persona durante el tiempo que sea necesario».
«Después de este tiempo, los datos personales serán destruidos de forma segura».
En la sección sobre biometría de un archivo titulado Facial Recognition Parental Flyer (Folleto de reconocimiento facial para padres) también alojado en el sitio web del Consejo, se dedica un esfuerzo a promover la captura de datos biométricos basándose en los precedentes encontrados en la historia antigua: «La biometría no es algo nuevo, sus raíces se remontan a los tiempos del antiguo Egipto. El uso de imágenes dactilares como dispositivo de seguridad comenzó con los funcionarios chinos que las utilizaban para sellar documentos en el siglo II a.C.».
El reconocimiento facial y otras tecnologías biométricas están aumentando en el Commonwealth. En septiembre, el NHS fue criticado cuando se reveló que su aplicación de pasaporte de vacunas, que utiliza el reconocimiento facial para verificar las identidades en el momento de registrarse, comparte datos con las agencias de aplicación de la ley.
Australia del Sur también comenzó a utilizar el reconocimiento facial para su aplicación de cuarentena COVID utilizada para hacer cumplir sus reglas de cuarentena de 14 días. El gobierno utiliza tanto la geolocalización como el reconocimiento facial en varias notificaciones de registro aleatorias realizadas todos los días. Si un usuario no se registra, recibirá una llamada del gobierno.
Si la llamada no recibe respuesta, la policía los visitará.
En Canadá, el gobierno federal tiene la intención de desplegar un sistema completo de reconocimiento facial para todos los titulares de pasaportes nacionales para 2023. El Departamento de Ciudadanía dijo en un aviso: «Los solicitantes dan su consentimiento para que sus fotos [del pasaporte] se utilicen para confirmar la identidad a través del sistema de reconocimiento facial del programa de pasaportes».
En junio, Canadá también anunció que crearía una Oficina de Biometría y Gestión de Identidad. En una licitación publicada en el sitio web del gobierno, dijo que la Oficina estaba destinada a ser creada «en respuesta a la situación de COVID 19 y otras prioridades operativas».
