Los gobiernos de Japón y Reino Unido han comenzado a negociar el Acuerdo de Acceso Recíproco (RAA por sus siglas en inglés) para profundizar los lazos de defensa entre las dos potencias globales. Una vez concluido, el acuerdo permitirá que ambas naciones y sus ejércitos aborden «los desafíos de seguridad global y contrarresten las amenazas compartidas», dijo el Ministerio de Defensa del Reino Unido.
La RAA describirá los términos y condiciones bajo los cuales el personal militar japonés y británico puede realizar actividades en las naciones de cada uno. Las actividades bilaterales, como los ejercicios conjuntos y la formación, serán «más fáciles y rápidas de facilitar».
«Japón es el socio de seguridad más cercano de Gran Bretaña en Asia, con valores compartidos e intereses estratégicos comunes. Esto envía una clara señal sobre nuestra determinación de profundizar la cooperación bilateral en materia de defensa, y el compromiso del Reino Unido con la región del Indo-Pacífico», dijo el Secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, en un comunicado.
La secretaria de Relaciones Exteriores del Reino Unido, Liz Truss, también afirmó que profundizar los lazos de defensa con Japón es una parte fundamental para garantizar un Indo-Pacífico abierto y seguro. Asimismo agregó que una sólida asociación económica y de seguridad con Tokio es importante para los intereses a largo plazo de Gran Bretaña.
Los expertos creen que la mención de «amenazas compartidas» por parte del Ministerio de Defensa del Reino Unido se refiere al régimen chino. Una cooperación más estrecha con Japón influye en el cambio estratégico del Reino Unido para centrarse en el Indo-Pacífico, como se describe en la Revisión Integrada del país publicada en marzo.
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“El Gobierno de Japón y el Gobierno del Reino Unido trabajarán en las negociaciones para lograr la pronta conclusión. La primera ronda de negociaciones se llevará a cabo el 7 de octubre”, dijo un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Japón.
Las negociaciones del RAA entre el Reino Unido y Japón se producen inmediatamente después del reciente acuerdo de asociación de submarinos de Londres con Estados Unidos y Australia. La medida se considera un paso hacia una mejor contención de la agresión china.
En julio, Wallace había anunciado que tanto el Reino Unido como Japón «protegerían y mantendrían el orden internacional basado en reglas». Wallace y su homólogo japonés, Nobuo Kishi, acordaron discutir la posibilidad de colaborar en el caza FX de próxima generación de Tokio, específicamente sus sistemas de motor y subsistemas.
En septiembre, el portaaviones británico HMS Queen Elizabeth hizo su primera escala en un puerto de Japón. Kishi se reunió con el comandante del grupo de ataque. El HMS Queen Elizabeth había participado en ejercicios conjuntos con buques de guerra de Japón, Canadá, Estados Unidos y los Países Bajos antes de llegar al puerto japonés de Yokosuka cerca de Tokio.
«El interés de los países europeos por los intentos unilaterales (de China) de cambiar el statu quo en los mares de China Oriental y Meridional… contribuye a la paz y la estabilidad en esta región… Espero que la escala en el puerto contribuya a un mayor desarrollo de la cooperación en materia de defensa entre Japón y Gran Bretaña», dijo Kishi a los periodistas.
Otro barco británico, el HMS Richmond, una fragata Tipo 23 que llegó al Indo-Pacífico junto con el HMS Queen Elizabeth, pasó recientemente por el Estrecho de Taiwán, una vía fluvial estrecha que separa a China de la nación insular.
“Después de un período ocupado trabajando con socios y aliados en el Mar de China Oriental, ahora estamos en ruta a través del Estrecho de Taiwán para visitar #Vietnam y la Armada Popular de Vietnam”, dijo en un tweet del 26 de septiembre de la cuenta oficial de HMS Richmond.
China afirma que Taiwán es su territorio. Como tal, las autoridades chinas no respondieron bien a que el HMS Richmond navegara por el Estrecho de Taiwán. El coronel Shi Yi, portavoz del Comando del Teatro Oriental del Ejército Popular de Liberación que supervisa el Estrecho de Taiwán, calificó el incidente como un «truco publicitario». Dijo que el paso del barco se realizó con «malas intenciones» para socavar la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán.
En una entrevista con SCMP, Zhou Chenming, investigador del instituto de ciencia y tecnología militar Yuan Wang en Beijing, dijo que el tránsito del HMS Richmond mostraba que el Reino Unido quería desempeñar un papel más importante en la región del Indo-Pacífico.
“La Royal Navy planea enviar más flotas a Asia-Pacífico para cumplir con las ambiciones de Londres de reanudar la influencia de Gran Bretaña en la región… Londres se dio cuenta de que los EE. UU. hasta ahora no tienen suficientes buques de guerra para cuidar el área del Lejano Oriente, por lo que es una buena oportunidad para que la Royal Navy comparta la responsabilidad con los aliados de Estados Unidos como Japón [y] Australia en la región para contener una armada del EPL en ascenso”, dijo Zhou.
